El trabajo en casa nos enseñó a distribuir el tiempo de forma distinta y aprovecharlo mejor. Sin embargo, para algunas personas se convirtió en una carga adicional que sigue presente.
Laborar horas de más y estar disponible el día entero son algunas de las situaciones que se pueden presentar a diario en el trabajo. Por eso, debes tener cuidado de atravesar la delgada línea entre ser productivo de manera sana y convertirte en un workholic.
Es normal querer sobresalir en nuestro lugar de trabajo y a veces queremos rendir más de lo que podemos para lograrlo. No obstante, se ha demostrado que la sobrecarga voluntaria de trabajo puede coincidir con una condición mental.
La gravedad de invertir tiempo de manera excesiva en el trabajo origina problemas en tu salud y relaciones interpersonales.
¿Qué consecuencias tiene la adicción al trabajo?
Problemas de salud.
Primero, las adicciones son trastornos que se generan a partir de conflictos internos. La mayoría de veces, resultan de la necesidad de evitar algo que nos causa emociones y sensaciones negativas.
A partir de eso, la salud mental se afecta de primera mano. Posteriormente, estas conductas abusivas pueden desembocar en la somatización de todo el esfuerzo excesivo puesto en el trabajo.
En el corto plazo parece ser un tema irrelevante, pero luego de un tiempo puede desarrollar enfermedades. La aparición de afecciones como el estrés, afectan el sistema digestivo y generan problemas de concentración.
Pensar de forma permanente en el trabajo.
Estimular la mente de forma excesiva alrededor de un mismo tema puede saturar tu creatividad.
Muchas de las habilidades desarrolladas por nuestro cerebro son resultado de la multiplicidad de temas e ideas que circulan en nuestra vida diaria.
Saturar tu mente puede bloquear la capacidad creativa que necesitas día a día en tus labores. Eventualmente puede llevarte a bloqueos y frustraciones.
¿Es tu caso?
No te preocupes, hoy te compartimos 7 tips para identificar estas situaciones y sacarle el máximo provecho al teletrabajo:
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La adicción al trabajo NO es una virtud.
Existe una creencia en torno al exceso de trabajo y es que aparenta ser un valor agregado. Incluso lo califican como esfuerzo, iniciativa o tenacidad, pero la verdad no es así.
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Productividad en justa medida.
Para evitar caer en el exceso de trabajo encuentra la medida justa a través de objetivos diarios.
Por ejemplo, con el calendario de entregas y reuniones semanales, ajusta las tareas que debes completar en el día para cumplir con tus compromisos. Al terminar las labores sabrás que no es necesario continuar, puedes hacerlo al siguiente día.
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Cuida tu salud.
Evita la exposición por horas a pantallas. Períodos de tiempo muy largos sin comer o cambiar de posición regularmente afectan nuestra salud física y mental.
Aprovecha el tiempo que tienes de más en casa y haz ejercicio. Realiza yoga o pausas activas. A continuación, te explicamos cómo hacerlo.
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Realiza pausas activas.
Establece momentos en el día para descansar tus ojos de las pantallas y espalda. Realiza estiramientos y recuerda que tus manos también se desgastan con el trabajo diario.
¡Toma 10 o 15 minutos para relajarte al día y así te recargarás de energía para continuar!
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Diferencia el 'teletrabajo' del tiempo en casa.
Trabajar desde casa no significa dejar de cumplir con tus labores. El home office no debe convertirse en parte de tu rutina personal.
Identifica muy bien los espacios que pertenecen a tu vida privada. Aprovecha este tiempo para despejarte, comer tranquilo y realizar otras actividades.
Respeta las horas de almuerzo y salida.
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Está bien no estar disponible.
Es importante establecer una hora para dar por terminado tu horario laboral. Las llamadas de tu jefe en la noche no deben convertirse en algo constante.
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Aprende a decir que no.
Uno de los síntomas que puede convertirte en un workholic es no ser capaz de decir no. Haz un recuento del trabajo por hacer y no te comprometas si tienes muchas tareas pendientes.
A veces creemos poder con todo, pero recuerda, es mejor responder de la mejor manera a las obligaciones de tu cargo sin saturarte con cantidades abrumadoras de trabajo.
